NUESTRA CIUDAD IDEAL

En la clase de lengua del grupo global, estamos inventando nuestra propia ciudad. Dejando volar nuestra imaginación, hemos empezado a describir cómo sería el lugar más impresionante en el que nos gustaría vivir. Cualquiera puede colaborar, aunque no sea de nuestra clase, escribiendo debajo de esta entrada un comentario. ¡Participa!

¡¡YA TENEMOS NOMBRE PARA NUESTRA CIUDAD!! Después de votar entre todos, hemos decidido llamarla: "Moonsea" ¿Quieres saber porque la hemos bautizado así? Si lees nuestra descripción, pronto lo sabrás:

En nuestra ciudad ideal nunca hay guerras ni peleas, ni siquiera se chilla, todo el mundo se respeta. Está situada en una isla submarina cerca de la luna, protegida por una gigantesca pompa de jabón, que parece una cúpula de cristal. Al atardecer, la bóveda cambia de color. La isla está repleta de naturaleza y la vegetación forma parte del paisaje de la ciudad, que está rodeada por un río de color morado. Hay árboles de todos los colores y al anochecer se iluminan como si fueran pequeñas estrellas, son nuestras particulares farolas. Los animales viven en libertad y no son agresivos, hay de todas las especies, incluso los que ya se extinguieron. Cada uno de los habitantes de la ciudad tiene su propio “tep”: el animal con el que se identifica y tiene una especial relación, comunicándose y ayudándose mutuamente.

En el centro de la ciudad hay castillo sin igual, único en su especie, todo el mundo le llama “El palacio de los gustos” y cuenta la leyenda que fue fundado por los mismísimos Hansel y Gretel. Está construido con todo tipo de alimentos, que nunca se pudren ni se acaban, así que cualquier ciudadano puede coger lo que necesite y cuando lo necesite, desde un salmón hasta una piruleta, pasando unos espaguetis a la carbonara o un refresco.

Las casas tienen formas geométricas, no hay dos iguales y, cada vez que se crea una nueva familia, esta sólo tiene que pensar cómo quiere que sea su casa y en ese mismo momento aparece dónde ellos decidan y cuando alguien muere, la casa desaparece como por arte de magia. No existen las escaleras: para bajar se utilizan toboganes y para subir colchonetas elásticas.

En nuestra ciudad los días de fiesta siempre llueve, porque en lugar de gotas de lluvia, cae confeti desde lo alto de la cúpula. En este maravilloso lugar, la gente va de un lugar a otro en pompas de jabón, sólo tiene que silbar cuando quiera que aparezca la burbuja y explotarla con el dedo cuando llega a su destino. 

Hay multitud de lugares para estar juntos: la piscina de chocolate, que está al lado de los muros del castillo, el cine en directo, situado a las afueras de la ciudad, dónde puedes entrar dentro de la película que elijas, como un personaje más. Cerca de los bosques de la isla, puedes visitar “La casa de la música”, allí viven los mejores compositores de la Historia y los instrumentos suenan solos. En la biblioteca de la pompa submarina, puedes elegir leer un libro, escucharlo o verlo. Cerca del río hay un polideportivo de magia en el que enseñan a desarrollar las habilidades personales de forma extraordinaria, por ejemplo: aprender a controlar el balón con la mirada en lugar de valerse de las extremidades, jugar al ajedrez utilizando la telepatía, a través del poder de la mente conseguir levantar un elefante con el dedo gordo del pie…

Ningún habitante tiene llaves porque todo el mundo respeta los hogares y pertenencias de los demás. Cada ciudadano ha desarrollado una cualidad propia de su tep, como una fuerza impresionante, vista de lince, posibilidad de camuflarse como un camaleón, metamorfosearse dentro de un capullo como las mariposas...

Todas las noches hay unas maravillosas vistas de la luna y es especialmente espectacular cuando hay luna llena porque la ciudad resplandece con una luz brillante. Los lobos aúllan llamando a su manada y los gatos maúllan, como protesta ya que no pueden dormir.

Nuestra ciudad es realmente ideal…que pena que sólo la podamos disfrutar en nuestra imaginación.